La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) se muestra preocupada por el “cierre temporal” de la sede de la Unidad Médica Nicaragüense (UMN), ubicada en Altamira, Managua.
El organismo reconoce los motivos del cierre. “Actos de hostigamiento y persecución contra integrantes, y pacientes del centro”.
Por tanto, llaman al Estado de Nicaragua a cesar todo acto que afecte la labor de la UMN, y otras organizaciones conformadas por médicos que fueron despedidos de los hospitales públicos por atender a ciudadanos heridos en las protestas antigubernamentales, y otros galenos que cuestionaban la deficiencia del sistema de salud, sobre todo en el contexto de la pandemia del COVID19.
Algunos médicos que pertenecen a la UMN. FOTO: Cortesía.
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“Cesar la represión y hostigamiento contra profesionales de la salud que son de oposición al gobierno. Así como, a garantizar el derecho a la salud por encima de cualquier consideración partidaria o política”, dicta la CIDH.
Publicación de la CIDH.
La instancia internacional destaca “la fundamental labor de la Unidad Medica Nicaragüense para informar sobre la situación de la pandemia ante falta de información oficial. Labor que causó que sus integrantes sufrieran actos de acoso y hostigamiento por parte del Estado de Nicaragua”.
El doctor, José Antonio Vázquez, presidente de la UMN, afirmó el jueves que en los últimos meses varios médicos han decidido exiliarse debido a la represión estatal en Nicaragua.
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