El gobierno de Colombia comunicó la decisión de llamar a consultas a su embajador en Nicaragua Alfredo Rangel a “raíz de los hechos violatorios de las garantías democráticas, de los derechos civiles y políticos del pueblo nicaragüense”, señala un comunicado de la Cancillería de relaciones Exteriores colombiana.
La cancillería explicó que este llamado a su embajador “obedece al compromiso del Gobierno de Colombia con los valores y principios consignados en la Carta Democrática Interamericana y en la Carta de la OEA”.
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El gobierno de Iván Duque al igual que la comunidad internacional condenó los ataques y detenciones contra los precandidatos presidenciales, periodistas y líderes sociales opositores al gobierno de Daniel Ortega.
“Expresamos nuestro rechazo a la sistemática persecución contra la oposición política, el periodismo y el liderazgo social en Nicaragua”, agregaron.
Al mismo tiempo instaron a la administración de Ortega a liberar a los presos políticos y llevar a cabo unas elecciones libres justas y democráticas.
“Colombia insta al gobierno de Nicaragua a la inmediata liberación de los presos políticos y a cesar esta persecución sistemática, así como a permitir el libre ejercicio de las libertades políticas y una elección democrática transparente y libre para que el pueblo nicaragüense escoja su destino”, dicta el comunicado.
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La nación sudamericana se une a los países de México y Argentina que también han llamado a sus embajadores en Nicaragua para «realizar consultas sobre las preocupantes acciones políticas-legales realizadas por el gobierno nicaragüense en los últimos días”, según un comunicado de estas dos naciones.
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