El cardenal nicaragüense y arzobispo de Managua, Leopoldo Brenes, aseguró que “el demonio anda suelto y quiere herir a la iglesia católica”.
Brenes denunció que los recientes ataques contra templos buscan herir a la iglesia católica.
“El demonio anda suelto y quiere herir a la iglesia, quiere herir a los obispos, quiere herir a los sacerdotes”, afirmó el cardenal.
El arzobispo realizó la Santa Misa, de manera virtual con mascarilla, frente a la destruida capilla de la Sangre de Cristo de la Catedral de Managua.
El viernes pasado sufrió severos daños tras ser incendiada por un desconocido.
“El rostro calcinado de esta imagen es un rostro vivo que nos sigue mirando a cada uno de nosotros con mirada de compasión, que nos está diciendo adelante, yo estoy con ustedes'”, expresó Brenes.
Acto terrorista
La Arquidiócesis calificó este incendio como un acto “terrorista”.
El ataque, desprendió el rostro de la venerada imagen de la Sangre de Cristo, causó conmoción en Nicaragua.
Conferencia Episcopal Española
Por su parte, la Conferencia Episcopal Española envió una carta al cardenal Leopoldo Brenes, arzobispo de Managua, ante los graves acontecimientos.
En los últimos días el país, ha registrado tres profanaciones en templos de distintas partes.
La carta fue escrita por el Cardenal Juan José Omella, Arzobispo de Barcelona (España) y presidente de la Conferencia Episcopal Española y el secretario general, Mons. Luis Argüello.
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En la carta, manifiestan su cercanía y fraternidad a todo la iglesia católica de Nicaragua.
Asimismo, afirmaron unirse al “clamor de muchos católicos y de hombres y mujeres de buena voluntad para que las autoridades competentes investiguen el origen de estos inaceptables actos violentos”.
También, subrayaron la importancia de que se realicen “votos por la convivencia entre todos los nicaragüenses»
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