¿Dónde está la solidaridad y el cristianismo que tanto pregona el gobierno?, se preguntan decenas de nicaragüenses al ser bloqueados por autoridades orteguista en la frontera Sur.
La caravana de compatriotas decidió regresar a Nicaragua debido a las malas condiciones en las que se encontraban en Panamá debido a la pandemia del coronavirus.
En una actitud arrogante, el gobierno de Daniel Ortega envió a autoridades de migración y de la policía a realizar un cordón humano para impedir el ingreso de los compatriotas.
Organismos de derechos humanos han rechazado esta muestra de desprecio del orteguismo contra sus mismos ciudadanos.
“Nicaragua es el único estado en el mundo que cierra sus fronteras a sus propios ciudadanos lo que se agrava aún más ante la actual situación de pandemia del Covid 19 que vivimos”, expuso en Colectivo de DDHH Nicaragua Nunca+.
En tanto, el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos calificó de perversa esta acción y atribuyó a un acto de tortura contra los nicaragüenses.
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