El hombre de 62 años de edad, murió a los meses que se convirtió en el primer humano que recibió un trasplante de riñón de cerdo que fue modificado genéticamente, lo que se consideró como un hito importante en la medicina.
Rick Slayman es quien recibió dicho trasplante de riñón, en el Hospital General de Massachusetts en el mes de marzo de este año, luego que se le diagnosticara una enfermedad renal terminal en el año 2023. El centro asistencial señala que no hay ningún indicio que determine que su fallecimiento sea consecuencia del trasplante.
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Después de ser intervenido por cuatro horas, por recomendación de los galenos, Slayman, fue dado de alta en el mes de abril. Aunque los médicos dijeron en ese momento que el nuevo riñón iba a durar varios años, aceptaron que había muchas incógnitas en este tipo de operaciones.
Por medio de un comunicado el Hospital de Massachusetts expresó: “El Sr. Slayman será visto para siempre como un faro de esperanza para innumerables pacientes de trasplantes en todo el mundo y estamos profundamente agradecidos por su confianza y voluntad de avanzar en el campo de los xenotrasplantes”.
También dicen en el escrito: “Ofrecemos nuestras más sinceras condolencias a la familia y seres queridos del Sr. Slayman al recordar a una persona extraordinaria cuya generosidad y amabilidad conmovieron a todos los que le conocieron”.
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La familia del receptor del riñón, lo destacó como un hombre dedicado a las personas en su vida y agregan en un comunicado: “Nuestra familia está profundamente apenada por el repentino fallecimiento de nuestro querido Rick, pero nos consuela saber que inspiró a tantas personas”, y además señala que “Millones de personas en todo el mundo conocieron la historia de Rick. Nos sentíamos -y seguimos sintiéndonos- reconfortados por el optimismo que brindaba a los pacientes que esperaban desesperadamente un trasplante”.
Cabe agregar que Slayman fue un paciente del programa de trasplantes de dicho hospital por 11 años. Este recibió un riñón de un donante humano en el año 2018, luego de sufrir diabetes e hipertensión por varios años. Posteriormente el riñón mostró insuficiencia a los cinco años, por lo que se vio obligado a reanudar la diálisis el año pasado.
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