El gobierno de Estados Unidos aseguró este viernes que mantuvo comunicación con España para facilitar que los presos políticos expulsados de Nicaragua puedan solicitar la nacionalidad española si así lo desean.
“Hemos estado en comunicación con España. Existe la posibilidad de que algunos exploren ofertas de otros países”, dijo en una rueda de prensa telefónica Emily Mendrala, subsecretaria de Estado adjunta para Latinoamérica.
Los 222 excarcelados políticos ya son beneficiarios de un programa humanitario para permanecer hasta por dos años en Estados Unidos, pero su futuro dependerá de la situación y preferencia de cada uno.
El Departamento de Estado facilitará los viajes para que los presos excarcelados puedan reunirse con sus familias en diferentes puntos de Estados Unidos.
También ofrece asistencia legal para que los liberados, que fueron despojados de la nacionalidad nicaragüense, puedan escoger las opciones que para ellos tengan más sentido, incluida la oportunidad de ir a España.
El Gobierno de Joe Biden sostiene que la liberación y expulsión de los 222 presos fue una “decisión unilateral” del Gobierno de Daniel Ortega y no negociada con Washington, pero Estados Unidos aceptó recibirlos.
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El Departamento de Estado asegura además que todos ellos abordaron voluntariamente el avión excepto dos personas que rechazaron viajar a Estados Unidos y permanecen detenidas en Nicaragua, entre ellas el Obispo Monseñor Rolando Álvarez.
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