El régimen de Nicolás Maduro en Venezuela celebró la decisión del gobierno de Daniel Ortega en Nicaragua de retirar a sus representantes ante la Organización de Estados Americanos (OEA), y expulsar al organismo del país.
“En su actuación contra Nicaragua, la OEA reiteró su histórico rol como instrumento del imperialismo estadounidense, para golpear la voluntad soberana de su pueblo”, dijo el gobierno venezolano en un comunicado.
“Nicaragua actúa en consecuencia a la histórica lucha de resistencia protagonizada por su pueblo, en defensa de su soberanía, independencia y dignidad nacional”, justificó Venezuela, país que también se retiró de la OEA el 27 de abril del año 2019.
En esa fecha, el gobierno de Maduro expresó que se retiró supuestamente porque la OEA ha llevado a cabo “acciones injerencistas, arbitrarias, ilícitas, desviadas, groseras, contra la soberanía de la patria” en Venezuela.
La noche del domingo, efectivos de la policía se ubicaron en las afueras de las oficinas de la OEA en Managua a esperas de ser desocupadas por el personal.
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En el comunicado, Maduro instó a otros países a romper relaciones con la OEA, considerada un principal foro regional para el diálogo, análisis de políticas y toma de decisiones en asuntos del Hemisferio.
La OEA reúne líderes de las naciones de las Américas para abordar temas y oportunidades de la región, pero Maduro llamó a retirarse del organismo con sede en Washington, y comenzar a ser parte de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), conformada por naciones como Antigua y Barbuda, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía, Surinam, Trinidad y Tobago.
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