Carmela Jolomá Yat, una mujer guatemalteca con siete meses de embarazo, confesó haber decapitado a su esposo con un machete, y alegó que fue en defensa propia, porque el hombre en estado de embriaguez, intentó abusar de ella.
El hecho ocurrió el pasado 13 de marzo, en Cobán, región central de Guatemala. Sin embargo, la noticia salió a luz recientemente y tomo cierta relevancia cuando un juzgado decidió dejarla en libertad.
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Medios internacionales apuntan que vecinos de la comunidad escucharon el desgarrador grito del hombre al ser degollado y al llegar a la casa de la pareja; encontraron a Yat bañada en la sangre de su marido, quien yacía en el suelo.
A pesar de haber sido entregada a las autoridades, la jueza a cargo del caso, estuvo de acuerdo con la versión de la acusada; quien afirmó haberlo hecho en legítima defensa, según informó Univisión.
De igual manera, Yat fue expulsada de su comunidad, junto con toda su familia. Por ello, las autoridades decidieron ingresarla en un centro de asistencia para que pueda dar a luz y recibir atención psicológica.
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