El nicaragüense Jaime Moreno Mendoza, quien se vio afectado entre el grupo de migrantes hacinados en el interior de un tráiler abandonado en México, recayó en su estado de salud, después de haber presentado una mejoría. Moreno era una de los 14 de 64 extranjeros que tuvieron que recibir asistencia médica, tras permanecer dentro de un contenedor sin agua, sin ventilación, y con una sensación térmica de 40 grados centígrados.
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El nicaragüense se encuentra internado en el Hospital Amparo Pape de Benavides, México. El director del centro médico, Ángel Cruz García Rodríguez, dijo que sufrió una falla renal y cardíaca.
“Aunque se logró extubar si tuvo bajas importantes como una falla cardíaca el pasado lunes y por la mañana de hoy tuvo una falla renal. Estamos dentro de las 72 horas de observación y máxima alerta, hasta ahorita el paciente sigue muy grave”, expresó.
García manifestó que Moreno se mantiene consciente, utilizando una mascarilla de oxígeno que busca prevenir por cualquier circunstancia que pueda presentar. A medida que las horas avanzan los doctores analizan la evolución de su estado de salud.
El médico afirmó que existe la posibilidad de enviarlo a otro centro hospitalario, para estabilizarlo. Medios nacionales de México informaron sobre la probabilidad de trasladarlo, por medio de una ambulancia de alta tecnología.
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Por último, agregó que desde el momento que fue ingresado, ningún familiar de Moreno ha consultado sobre su estado de salud.
“Hasta el momento nadie ha pedido información sobre su salud, como sus familiares o compañeros, solo la Secretaría de Salud como el Instituto Nacional de Migración”, explicó.
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