En el marco de la campaña ‘‘Nicaragua en Libertad, con Justicia y sin Impunidad’’ inauguran en la Asamblea Legislativa de Costa Rica la exposición de retratos de las familias que exigen justicia para sus familiares asesinados.
En dicha presentación la presidenta de dicha institución costarricense, Silvia Hernández, manifestó su “inquebrantable apoyo al pueblo nicaragüense por el anhelo de que el dialogo triunfe”.
Del mismo modo, recalcó que los nicaragüenses tienen que tener la “plena certeza de que este parlamento será siempre un refugio seguro para quienes luchen por la democracia”.
La política sostuvo que la falta de derechos humanos y libertades en Nicaragua les duele no solo a “todos los demócratas del planeta, pero sin duda le duele aún más a la mayoría del pueblo nicaragüense que es demócrata y se ve hoy aplastados por la fuerza” del gobierno de Daniel Ortega.
Por lo tanto, aseguró que “es la verdad que hoy nos tiene convocados”. De igual manera, la costarricense dijo que con “una angustiante frecuencia me repito: ¿qué acciones eficaces podríamos tomar desde la Asamblea Legislativa como Estado o como Nación, para prestarle una mano a los nicaragüenses que luchan por la libertad y la democracia de su país?, ¿será acaso con proclamas institucionales que logramos algo?, ¿podrán los gestos simbólicos derribar, aunque sea una sola piedra del muro del gobierno?”
“¿Que tanto debe y puede presionar Costa Rica a las naciones democráticas del mundo para que vuelvan los ojos y su atención sobre lo que sucede en Nicaragua y se tomen acciones que socaven las bases del gobierno nicaragüense?, ¿cómo podemos ayudar a Nicaragua a librarse del gobierno de Ortega por la vía pacífica?
Por lo cual, Hernández manifestó que no tiene “respuestas a todas estas preguntas, pero si la certeza de que al menos debemos alzar la voz por aquellos que han sido silenciados, puestos injustamente en una prisión por un gobierno dominador y por todas aquellas otras personas que han debido buscar refugio fuera de su tierra”.
Asimismo, ejemplifico al gobierno de Ortega como la “piedra de Sísifo, Nicaragua ha vuelto a caer en dictadura, pero a diferencia al eterno castigo de la mitología griega la fortaleza y el espíritu aguerrido del pueblo nicaragüense logrará retomar la empinada cuesta, llegará el momento en el que alcance la cima de la democracia, el progreso y de la libertad”.
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