El sistema judicial de Nicaragua, dominado por el partido de gobierno, condenó a casi seis de prisión y 500 días multas al preso político Sergio Beteta, el joven universitario que protestó en las cercanías de la Universidad Centroamericana (UCA) en Managua.
Fue detenido el pasado 21 de diciembre y acusado por los supuestos delitos de “tráfico de estupefacientes” (2,340 gramos de marihuana), y “tenencia ilegal de armas”.
La condena se da a pesar de videos, fotos y cobertura periodística que confirmaban la inocencia de Beteta, según el abogado Julio Montenegro.
Beteta mientras protestaba, alzó la Bandera Azul y Blanco de Nicaragua, y quemó la rojinegra del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
Tuit del abogado Julio Montenegro.
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Durante el proceso, en los juicios, testigos policías dijeron que el joven no portaba la bandera de Nicaragua y no quemaba la del FSLN cuando fue arrestado, como si no existieran fotos y vídeos de lo ocurrido.
Cuando se llevó a cabo la audiencia inicial, en lugar de firmar el acta de cierre de la audiencia inicial, el preso político, escribió tres palabras: «Viva Nicaragua Libre».
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