La presa política María Esperanza Sánchez, de 51 años de edad y originaria de Matagalpa, cumplió este martes 26 de enero un año de estar encarcelada en el penal de mujeres “La Esperanza”.
La activista fue detenida el 26 de enero del 2020 en una casa de seguridad en Managua, donde estaba resguardada desde el mes de noviembre de 2019, debido al hostigamiento y amenazas de muerte por fanáticos del gobierno.
El sistema judicial orteguista la condenó a 10 años de prisión y 31 mil córdobas por el delito de tráfico de estupefacientes.
Publicación extraída del Facebook de Sherly Sánchez.
Su hija Sherly Sánchez publicó en sus redes sociales que ha sido un año de injusticia, de atropellos y de burla. Exige la liberación de su progenitora y de todos los presos políticos.
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