Hablar de proyectos, de Rubén Darío y de diálogo, fue la forma más sutil para el presidente Daniel Ortega de anunciar su campaña política ayer (11.01.2021) en un discurso emitido, según el analista político José Dávila. Aunque considera que el mandatario siempre ha estado en campaña.
“Que se fijen allí mismo en su pueblo cuántas obras se han hecho; que se fijen ahí mismo en sus calles cuántas casas, no solo el proyecto Bismarck, sino que también casas que se construyen en las comarcas, en las comunidades, bajo la iniciativa de las alcaldías…”, dijo el mandatario.
Dadas las palabras, Dávila señala que Ortega siempre ha utilizado el modelo de promesas en cuanto a proyectos cada vez que se acerca el proceso electoral. Ocurrió en 2006, 2011,2016.
En tales fechas, el Gran Canal Interoceánico y la refinería Supremo Sueño de Bolívar, fueron ilusiones vendidas por el líder del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
“Claramente va a querer presentarse como el que hace obras, el que tiene cultura, etc. Eso como parte de tratar de cambiar un poco la imagen que tenemos los nicaragüenses y la comunidad internacional de él”, expresó el también ex diplomático.
Factor infraestructura
Dávila rechaza que para las campañas electorales, Ortega utilicé el factor infraestructura antes que el respeto a los derechos humanos y las libertades públicas.
“Todavía no hay reformas electorales, todavía no hay garantías de elecciones libres, todavía están los presos políticos. Esto es parte de un mandatario que realmente no termina de ubicarse en la realidad que estamos”, agregó.
En su discurso el presidente dejó claro que pretende instalar una mesa de diálogo, pero después de las elecciones generales del 7 de noviembre. “Para que lo que quedó aprobado en la Constitución, pueda caminar, tomando en cuenta las nuevas circunstancias”, manifestó.
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