El presidente de Argentina, Alberto Fernández, notificó este jueves que firmó un contrato con Rusia para vacunar a 10 millones de personas con la Sputnik V, vacuna producida en el país presidido por Vladimir Putin.
La vacuna Sputnik V tiene más del 90 por ciento de efectividad contra el COVID-19, según los especialistas rusos, y se ha comparado muchas veces con la desarrollada por la farmacéutica Pfizer.
Durante lo que queda del 2020 pretenden que la vacuna se aplique a alrededor de 300 mil personas, y entre enero y febrero del 2021 totalizar los vacunados según el acuerdo.
El presidente argentino dijo que la prioridad será la población en riesgo, que rondan los 13 millones.
Fernández también informó a medios de comunicación que su confianza es tanta, que él será quien se vacune primero cuando lleguen las dosis al país sudamericano.
“Miren, para sacarle la duda a todos, cuando esa vacuna esté aquí, el primero que se va a dar la vacuna soy yo, porque no tengo ninguna duda de la calidad de la vacuna.” Dijo el presidente.
Aun así la vacuna debe contar con la aprobación de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat). Por esa razón funcionarios de su gobierno, viajarán a Rusia la próxima semana para “verificar in situ” y despejar dudas.
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