Con 74 votos a favor, 0 en contra, 0 abstenciones y 16 presentes, se aprobó este jueves en la Asamblea Nacional la reforma a la Ley General de Aguas que pretende privatizar el vital líquido a través de la otorgación de licencias de concesiones.
Es decir, con esta reforma el régimen trata de promover una mayor participación de empresas privadas en la prestación del servicio, lo que amenaza a los usuarios por que esto puede implicar la pérdida de subsidio público.
Diputadas sandinistas.
Foto: Canal Parlamentario de Nicaragua.
Con esto, la Autoridad Nacional del Agua (ANA) se convierte en un poderoso ente estatal haciendo de “juez y parte”, pues la entidad será la encargada de vender las concesiones a las empresas que prestarán el servicio de agua potable y saneamiento a la población, y a la vez regular el uso de este recurso hídrico en el país.
“El negocio de sus vidas”
La ex funcionaria de la Empresa Nicaragüense de Acueductos y Alcantarillados Sanitarios (Enacal), Ruth Selma Herrera cuestionó la reforma y considera que la misma abre totalmente la posibilidad de que empresas allegadas al Gobierno ejecuten “el negocio de su vida”.
Voz de Ruth Selma Herrera, ex funcionaria de Enacal
Ruth Selma Herrera.
Foto: Cortesía Vos Tv
Pero aparte de las empresas que quieran sumergirse al negocio, Herrera considera que ANA será la que más se beneficie por las gestiones a realizar, a través de la recién creada Comisión de Administración Sustentable del Agua.
“Esa comisión va a tener solamente participación de las instituciones del Estado y va asumir la parte regulatoria, establecer tarifas, hacer estudios de factibilidad a las empresas y realizar tramitología para ser parte del colectivo”, señaló la ex funcionaria de Enacal.
Voz de Ruth Selma Herrera, ex funcionaria de Enacal
La reforma a la ley produjo cambios en 59 artículos. Desde que se introdujo la iniciativa los expertos han advertido sobre un excedente de tres por ciento que se verá reflejado en la factura del consumidor. Herrera sostiene esa hipótesis y añade que “esto es un bofetada a al derecho y al bolsillo por que el agua se convertirá en una mercancía”.
Voz de Ruth Selma Herrera, ex funcionaria de Enacal
Diputados sandinistas: “No es privatizar el agua”
Los diputados sandinistas manifestaron que el agua es un derecho humano, sin embargo, fueron ellos quienes aprobaron esta reforma a Ley de Aguas. Carlos Emilio López justificó su voto alegando que lo que se creó es “una serie de mecanismos que permitirán la modernización y ordenamiento del sector público, así como la regulación y distribución del recurso hídrico”.
Diputado sandinista Carlos Emilio López durante su intervención en la sesión de la Asamblea Nacional.
Foto: Cortesía
Algunos también politizaron la reforma. El parlamentario Orteguista Wálmaro Gutiérrez Mercado arremetió contra los adversarios políticos del Frente Sandinista de Liberación Nacional y alegó que no se trata de una privatización del agua, por tanto los pliegos tarifarios no serán cambiados.
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