Al menos 30 detenidos y varios heridos en protestas contra la asunción del nuevo presidente de Perú, Manuel Merino.
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De igual manera, las manifestaciones son en apoyo al destituido mandatario Martín Vizcarra.
Las manifestantes tuvieron lugar en la zona central de Lima, donde fueron desplegados unos 600 policías que lanzaron bombas lacrimógenas para dispersar las protestas.
En las cuales, varias personas resultaron heridas por perdigones disparados por los agentes, según el portal de noticias IDL Reporteros.
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“La policía lo que está haciendo es controlar a los manifestantes, pero al parecer estos señores están cometiendo actos violentos”, aseguró el general José Luis Cayas a una estación de radio peruana.
De igual manera, señaló que la policía lanzó bombas lacrimógenas para evitar los contactos entre manifestantes y policías a fin de prevenir contagios de COVID-19.
Por su parte, Amnistía Internacional exigió a las “autoridades peruanas detener inmediatamente la represión de las manifestaciones y garantizar derechos de todas las personas”.
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