Ordenan el cierre de dos centros de atención a niños y adolescentes en Casa Alianza

El Gobierno de Daniel Ortega a través del Ministerio de la Familia (MIfamilia) ordena cerrar dos centros residenciales especializados de Casa Alianza organización que protege a niños, niñas y adolescentes que vivian bajo riesgo de violencia en sus viviendas.

La notificación la firmó la ministra de la familia, Johana Vanesa Flores Jiménez, y la entregaron el pasado 20 de octubre. Casa Alianza tiene 22 años de operar como organización.

Foto extraída de página oficial de Casa Alianza

Es una organización no gubernamental que desde 1998 se ha dedicado a brindar atención integral a niños, niñas y adolescentes de entre 13 y 17 años que están en situación de calle, adicciones y que son sobrevivientes de múltiples formas de violencia.

Mifamilia atribuye el cierre a una supuesta violación de las normas establecidas en el marco jurídico vigente de Nicaragua.

¿Por que lo cierran?

Supuestamente Casa Alianza no cumplió con las causales establecidas en el artículo 76 del Código de la Niñez y la Adolescencia, que dicta que las instituciones públicas o privadas, junto al Estado, “brindarán atención y protección especial a las niñas, niños y adolescentes” que se encuentren situaciones de riesgo y requieran estén en “condición o circunstancia que requiera de protección especial”.

Según el Ministerio de la Familia, los niños, niñas y adolescentes ingresan bajo el modelo de “internamiento”.

Comunicado del Ministerio de la Familia

“En los próximos 15 días procederá a realizar el egreso de las niñas, niños y adolescentes que actualmente se encuentran en Residencia de Madres Adolescentes, así como a los adolescentes que se encuentran en Residencia Conrad Hilton”, dice en su parte final la notificación firmada por la ministra.

Comunicado del Ministerio de la Familia

A inicios de octubre se conoció que el Ministerio de la Familia también ordenó el cierre de algunos centros de protección especial y hogares sustitutos en Managua, Carazo, Granada y Rivas, mientras que en otros se han llevado a niños y adolescentes para devolverlos a sus núcleos familiares, de donde habían salido por el riesgo que representaba.

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