Tras más de 12 horas de haber irrumpido en la Catedral de Managua, las turbas orteguistas entregaron el templo a autoridades eclesiales de la Arquidiócesis de Managua.
Como si se tratase de un espectáculo de entretenimiento, los líderes de los delincuentes que agredieron a uno de los vicarios, fueron apañados por los medios de propaganda del oficialismo.
Pretendieron “regañar” a los sacerdotes de la Arquidiócesis por haber alojado a las madres de presos políticos en huelga de hambre.
En representación del Cardenal Leopoldo Brenes estuvo el padre Boanerges Carballo quien le recordó a los oficialistas que la primera que quiere la paz es la Iglesia, citando al papa Juan Pablo II.
También exhortó a los secuestradores del templo que así como limpiaron físicamente los predios de Catedral, que asimismo limpien su corazón.
La Arquidiócesis de Managua comunicó oficialmente la entrega de Catedral y pidió a los fieles mucha oración en estos momentos que vive el país.
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