Bahamas se enfrenta a una larga crisis humanitaria, una semana después del devastador paso del huracán Dorian, con un balance provisional de más de 40 muertos y cerca de 70 mil personas sin hogar, mientras continúan las evacuaciones, búsquedas de víctimas y el latente riesgo sanitario.
La Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) prometió un millón de dólares adicionales en asistencia para Bahamas (para un total de más de USD 2,8 millones), tras un diagnóstico desolador.
Algunas áreas parecen “como si les hubieran lanzado bombas nucleares”, comparó Mark Green, director de la agencia, tras recorrer Abaco y otras partes de las Bahamas desde el aire.
“Así de grande es el sufrimiento y la devastación. Reconocemos que hay un largo camino por delante, pero vamos a trabajar de cerca con el primier ministro y su gobierno para asegurar que la ayuda ofrezca un alivio inmediato”, añadió el funcionario.
El balance provisional del desastre, entregado con moderación por las autoridades de Bahamas el domingo, subió a 44 la cifra de víctimas fatales. Pero advirtieron repetidamente que el número estaba escalando.
AFP y Reuters
Deje su comentario