Industriales nicaragüenses advirtieron que el sector enfrenta uno de sus peores momentos porque las medidas económicas gubernamentales para enfrentar la crisis socio política los están asfixiando y tienen al país al borde de la desindustrialización.
El presidente de la Cámara de Industrias de Nicaragua, Sergio Maltez, manifestó que: “estamos retrocediendo, que significa, que estamos dejando de ser productores y nos estamos volviendo un país distribuidor, todo lo que es la industria en si, porque estás metiéndole impuestos a todo lo que es la importación de materia prima, entonces, sale más barato para muchas de las empresas en vez de producir localmente importarlo de afuera, y eso es grave”.
Maltez advirtió que el sector no resiste mayores incrementos en sus aportes al Estado, mismos que han provocado un desempleo en la industria superior al 35%.
Entre las medidas que ha tomado el Estado y que tienen al sector al borde de la desaparición están una reforma fiscal, una reforma al seguro social y el incremento desproporcionado en los precios de la energía eléctrica.
Lucy Valenti, presidenta de la Cámara Nacional de Turismo de Nicaragua, señaló que todos estos factores están dándole un duro golpe a la economía del país.
“Esta grave problemática de no resolverse estaría mandando al desempleo a muchas más familias nicaragüenses y llevando a la economía de Nicaragua a un camino de no retorno”, señaló la empresaria.
Nicaragua es el país de la región Centroamericana con el servicio eléctrico más caro, revelaron los empresarios, lo que también pone en riesgo al sector de las pequeñas y medianas empresas. La PYMES demandaron al Estado una reforma al pliego tarifario de energía, ya que el costo de la electricidad es insostenible porque representa entre el 30 y el 40 % de los costos operativos del sector.
Por su parte, el Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP) señaló las seis consecuencias negativas de la reforma fiscal, causando, por ejemplo, un estancamiento de la industria al encarecerse los productos, la disminución del consumo en la población y una menor producción, y eso afecta al empleo.
En tanto, el nuevo plan de Expansión de Generación de Energía del Ministerio de Energía y Minas de Nicaragua advierte que el país sufrirá apagones constantes a partir de 2022, debido a la falta de inversión actual en las plantas generadoras, hecho que crea otra preocupación en el sector empresarial que no ha sido tomado en cuenta para el proceso de revisión de la reforma a la Ley de Concertación Tributaria que se está llevando a cabo en el Ministerio de Hacienda y Crédito Público.
VOA
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