El respeto al Estado de Derecho es lo que buscan sectores de la Nación como condición fundamental para que autoridades reanuden un Diálogo Nacional, opina el filósofo nicaragüense Alejandro Serrano Caldera.
“Que la sociedad lo que busca es respecto a los derechos y garantías fundamentales, respecto a la Constitución Política y a las Leyes, respeto a la Sociedad Civil y a la Ciudadanía, respeto a esos derechos que constituyen la base de toda sociedad que vive en condiciones mínimamente aceptable”, señala el filósofo.
El intelectual nicaragüense coincide con las precondiciones que ha establecido el Parlamento Europeo para solucionar crisis sociopolítica del país: libertad de presos políticos, cese de la represión y adelantar las elecciones en Nicaragua.
“Por eso es importante insistir en el diálogo, pero un diálogo que se de en condiciones perfectamente aceptable. No puede haber un diálogo con represión, no puede haber un diálogo con encarcelamiento, no puede haber un diálogo con torturas, pero sí debe buscarse que de alguna manera el diálogo se de todo el respecto a todas estas condiciones anteriormente mencionadas”, indicó el filósofo.
Hay una invocación nacional e internacional al diálogo que permita encontrar una salida justa, equitativa, moralmente aceptable y que efectivamente permita, restablecer los derechos violentados y evitar que continúe esa violación, la represión y la transgresión a esos principios y valores básicos, justificó.
El doctor Alejandro Serrano Caldera nació en Masaya, el cinco de octubre de 1938. Jurista, filósofo y escritor. Doctor en Derecho por la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua y especializado en Derecho Sindical y del Trabajo en la Universita degli de Roma. Profesor titular de diversas cátedras y maestrías en Nicaragua, ha impartido curso y conferencias en Universidades de América Latina, Europa y Estados Unidos, presidente de la Corte Suprema de Justicia, embajador en Francia, ante la Unesco y ante las Naciones Unidas, rector de la UNAN—Managua, presidente del Consejo Nacional de Universidades (CNU) y del Congreso Superior Centroamericano Universitario, (CSUCA). Autor de más de veintitrés libros, algunos de ellos traducidos al inglés, francés y portugués. Ha publicado los cuatro primeros volúmenes de sus Obras. Algunas distinciones: Gran Oficial de la “Orden del Mérito”, “Palmas Académicas”, según se lee en la presentación que hace el sitio digital de la Academia Nicaragüense de la Lengua.
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