La exactriz estadounidense Meghan Markle no pudo festejar sus 37 años el fin de semana ya que debió cumplir -una vez más- con un compromiso de la realeza británica.
Los duques de Sussex fueron retratados el sábado pasando un buen momento en la boda de Charlie van Straubenzee, un amigo íntimo de Harry, en Surrey, al sur de Inglaterra.
Además de los obsequios de familiares y amigos, Markle habría recibido regalos y tarjetas de admiradores. Pero como Duquesa de Sussex, tendrá que devolver muchos de ellos al igual que lo hizo con sus obsequios de boda. Como miembro de la familia real, tiene que tener mucho cuidado con los regalos que acepta y hay muchas reglas a seguir.
Markle está obligada a rechazar regalos de negocios o personas que no conoce personalmente (por ejemplo, marcas o fanáticos reales), y la razón es muy clara.
“Los obsequios ofrecidos por personas privadas que viven en el Reino Unido y que no son personalmente conocidos por la familia real deben rechazarse cuando existan dudas sobre la procedencia o las motivaciones del donante”, establece la norma.
Y también hay otro motivo para hacer la devolución: “Por razones de seguridad, el Equipo de Correspondencia de la Reina no puede aceptar regalos que no hayan sido solicitados”.
La única excepción es si el regalo se ofrece como recuerdo de una visita oficial.
Fuente: MSN
Deje su comentario