Facebook ya ha sido varias veces objeto de crítica por parte de las agencias de protección de datos y los políticos aunque siempre lograba recuperarse. Pero ahora un escándalo en torno a la empresa de análisis de datos, Cambridge Analytica, durante la campaña electoral de Donald Trump ha sumido a la red social en su crisis más profunda.
Facebook se considera una víctima del engaño, pero la compañía tecnológica más grande del mundo tiene muchos frentes abiertos. Políticos de ambos lados del Atlántico apuestan por endurecer la regulación. Los inversores se deshacen de las acciones de Facebook. En Twitter circula el hashtag “#deletefacebook” (borra Facebook), que fue retomado, entre otros, por el cofundador de Whatsapp Brian Acton, quien vendió el servicio de mensajería por U$S 22.000 millones a Facebook y hasta hace poco también era empleado de la empresa. Estas son señales de que la opinión pública está unánimemente contra Facebook como seguramente nunca antes. La socióloga Zeynep Tufekci escribe en “The New York Times” sobre la “máquina de vigilancia de Facebook”. El ex inversor de la red Roger McNamee alerta sobre el hecho de que, si la compañía no reacciona, los usuarios le darán la espalda. Y esto es algo que podría “amenazar de manera permanente” a la plataforma. El profesor de la escuela de negocios Wharton Michael Useem cree que es un “momento catastrófico” para la compañía.
El miércoles, en sus primeras declaraciones tras el escándalo, Mark Zuckerberg admitió que la gigantesca red social que dirige “cometió errores” y se vio involucrada en un “abuso de confianza”.
Lo ocurrido se puede resumir rápidamente. Cambridge Analytica, que trabajaba, entre otros, para Trump, realizó una búsqueda de datos de usuarios para llevar a cabo acciones de publicidad electoral segmentada. ¿Pero cómo se accede a estos datos si Facebook no los vende? Dejando que los propios usarios proporcionen esta información. Así, el profesor británico Aleksandr Kogan puso en funcionamiento una app de Facebook de predicción de personalidad con una encuesta que prometía ofrecer a los usuarios un perfil psicológico. Unos 270.000 personas descargaron la encuesta, según Facebook.
Lo que no sabían era que sus datos iban a parar a Cambridge Analytica para la creación de perfiles psicológicos, junto con informaciones de los perfiles de sus amigos de Facebook. Todo ello sin el conocimiento de los usuarios. Facebook ya había restringido en 2015 este acceso a la interfaz de los perfiles de amigos. Cuando el mismo año la compañía se enteró a través de la prensa de la actuación de los analistas de datos, pidió a los usuarios que borraran las informaciones. La cosa parecía estar controlada. Pero el pasado fin de semana quedó claro que uno de los implicados, el analista de datos Christopher Wylie, quería quitarse el sentimiento de culpa. Al mismo tiempo salió a la luz la impactante cifra de 50 millones de usuarios afectados. La reacción de Facebook empeoró aún más las cosas. La compañía intentó tomar la iniciativa antes de que la noticia saltara a los medios y excluyó a Cambridge Analytica de la plataforma. Pero esto no calmó el revuelo.
Para Clarín, podría avecinarse el cierre de Facebook
Consideró que la empresa tiene “muchos frentes abiertos” y alertó por la salida de los inversores. La entrevista de la CNN a Mark Zuckerberg.
Como consecuencia del escándalo que rodea a Facebook por la entrega de datos de 50 millones de usuarios a Cambridge Analytica para fines políticos, Clarín aseguró que la empresa de Mark Zuckerberg “enfrenta su peor momento y ya se habla de un posible cierre”.
Según indicó en la página 27, aunque Facebook “se considera una víctima del engaño, la compañía tecnológica más grande del mundo tiene muchos frentes abiertos”. Entre ellos, destacó los de índole política en “ambos lados del Atlántico” porque los países “apuestan por endurecer la regulación”.
Además, subrayó que los inversores se están deshaciendo de las acciones de compañía, mientras en Twitter se impone el hashtag #deletefacebook.
Luego agregó que la socióloga Zeynep Tufekci editó en The New York Times acerca de “la ‘máquina de vigilancia de Facebook’” y que el ex inversor de Facebook Roger McNamee sostuvo que “si la compañía no reacciona, los usuarios le darán la espalda”.
En suma, el matutino advirtió que todos estos hechos “son señales de que la opinión pública está unánimemente contra Facebook como seguramente nunca antes lo estuvo”.
Por otro lado, Mark Zuckerberg finalmente habló sobre el mayor escándalo que enfrenta su empresa en una entrevista con la CNN:
Fuente: La Gaceta y Diario sobre Diarios
Deje su comentario