Al menos 184 personas han muerto en la capital de Haití, Puerto Príncipe, por orden de un jefe pandillero, en represalia por la muerte de uno de sus hijos, al creer que cayó enfermo fruto de una maldición, reporta la prensa internacional.
El Alto Comisionado para los Derechos Humanos de Naciones Unidas, Volker Turk, ha cifrado en 184 las muertes orquestadas “por el líder de una poderosa banda en la zona de Cité Soleil”, una de las zonas más peligrosas y empobrecidas de la capital.
“Estos últimos asesinatos elevan el número de muertos en Haití este año a la asombrosa cifra de 5.000 personas”, ha informado Turk.
La mayoría de los muertos son mayores de 60 años y practicantes del vudú, religión con gran arraigo en este país caribeño. El responsable de la masacre es Monel Féliz, conocido como ‘Mikano’, jefe de Viv Ansanm, una coalición de bandas formada en 2023, con el objetivo de derrocar al Gobierno, logrando en marzo de este año la salida del primer ministro, Ariel Henry.
El gobierno del primer ministro de Haití ha condenado el ataque calificandolo como un “acto de barbarie de una crueldad insoportable que ha costado la vida a más de un centenar de mujeres y hombres, en su mayoría ancianos indefensos”.
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