El ministro de Asuntos Exteriores noruego, Espen Barth Eide, se mostró preocupado este domingo ante la tensión bélica que enfrenta Israel y el movimiento terrorista Hezbolá en Oriente Medio.
El funcionario se ha pronunciado luego de conocer la noticia de los ataques con cohetes que alcanzaron este sábado un campo de fútbol en la localidad de Majdal Shams, en los Altos del Golán, Israel, donde dejó varios muertos entre ellos varios niños, y del cual se responsabiliza a Hezbolá.
“Estoy profundamente preocupado por la evolución de los acontecimientos en la región. Una escalada del conflicto entre Israel y Hezbolá podría representar un punto de inflexión en el conflicto”, indicó el noruego.
“Condenamos enérgicamente los ataques contra civiles. Todas las partes deben hacer lo que puedan para proteger a los civiles de acuerdo con sus obligaciones en virtud del derecho humanitario”, afirmó el diplomático, y agregó que estos acontecimientos solo demuestran lo “frágil y grave” que está la situación en Oriente Medio.
En su pronunciamiento, Barth Eide hizo un llamado a ambas partes a que hagan todo lo posible por evitar “una guerra regional de grandes proporciones”, y evitar mayores tragedias como la que ocurrió este fin de semana.
Autoridades de Israel comunicaron que el ataque dejó al menos 12 víctimas mortales, incluidos niños, y más de 30 heridos. Las personas afectadas tenían entre 10 y 20 años.
En tanto el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, prometió una respuesta al mortífero ataque con cohetes. “Hezbolá pagará por ello un alto precio que no ha pagado hasta ahora”, dijo el líder judío, según recogen varios medios internacionales.
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