
Esta tarde Bolivia vivió momentos tensos luego que el Ejército del país sudamericano liderado por el general boliviano Juan José Zúñiga Macías, se desplazará sobre la plaza Murillo, situada en La Paz, donde se encuentraban el poder ejecutivo y legislativo, entre otros lugares claves del gobierno
Una vez estando en el lugar la organización castrense ingresó por la fuerza al palacio presidencial de Bolivia, donde se encontraba el presidente de Bolivia y todo su gabinete.
“Pronto va a haber una posesión, seguramente pronto va a haber un nuevo gabinete”, dijo Zúñiga, en las afueras de las instituciones del gobierno.
Zúñiga, se había presentado al lugar en una tanqueta y armado, según la prensa que realiza la cobertura del hecho.
Por su parte, Arce denunció momentos antes de la irrupción, que en los alrededores del palacio había “movilizaciones irregulares de algunas unidades del Ejército Boliviano”.
“La democracia debe respetarse”, dijo el mandatario vía redes sociales. Distintos países de Latinoamérica e integrantes de la Organización de los Estados Americanos (OEA) condenaron el actuar del Ejercitó.
Juramentan a nueva dirección
Tras los hechos, Arce, juramento a la nueva dirección de las fuerzas armadas del país, en la que otorgó a José Sánchez el título de nuevo comandante del Ejército. Durante el acto relámpago, Gerardo Sabala fue nombrado nuevo jefe de la Fuerza Aérea, y Wilson Guardia pasó a ser jefe de la Armada.
De esa manera Sánchez como nuevo líder de la organización castrense ordenó la retirada del cuerpo militar que estaba en las afueras de la instituciones gubernamentales.
“Es una situación especial porque nadie desea la imagen que estamos viendo en las calles. Es por eso que ahora, en mi condición de comandante general del Ejército y en representación de los tres comandantes de fuerza pido, ordeno y dispongo que todo el personal movilizado en las calles debe retornar a sus unidades”, afirmó.