La Red de Incidencia, Género y Energía (RIGE) propone al gobierno de Nicaragua implementar una Agenda Nacional de Acción y Plan de Inversión para reducir las brechas de acceso a energía eléctrica en zonas rurales del país y mejorar el sistema de producción y distribución de la misma.
Según el Balance Energético Nacional de dos mil once elaborado por el gobierno a través del Ministerio de Energía y Minas, en Nicaragua aproximadamente 1.22 millones de personas no tienen acceso a energía eléctrica.
Esta propuesta surge en el marco del numeral siete de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y de la Iniciativa Energía Sostenible para Todos (SEFORALL por sus siglas en inglés), implementados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU); que consiste en mejorar el acceso a energía limpia y sostenible para todas las personas en Nicaragua.
Este mismo estudio del gobierno en el dos mil once, indica que el 87.9% de los hogares nicaragüenses, tanto urbano como rural, usa la leña como consumo final energético.
En el ánimo de sumar esfuerzos para una política energética amplia, renovable y barata; las organizaciones, instituciones y empresas que integran la RIGE, proponen los siguientes puntos para cumplir con el numeral siete de los ODS y la Iniciativa SEFORALL implementados por la ONU:
- Proceso de implementación inclusivo.
- Creación de una Plataforma o Comisión Nacional para el seguimiento de la SEFORALL en Nicaragua.
- Optimizar el reporte de datos respecto a las metas SEFORALL.
- Considerar la participación de micros y pequeñas empresas, cooperativas, además de las corporaciones.
- Los indicadores deberían contemplar más allá de la cobertura y considerar aspectos de asequibilidad, calidad y sostenibilidad en el acceso a la energía.
- Facilitar y coordinar el acceso y flujo de información.
- Creación de capacidades para el abordaje de la energía sostenible, dentro de las instituciones, organizaciones y sector privado.
El exsecretario general de la ONU, el surcoreano Ban Ki-moon, afirmó que “la energía es el hilo conductor que conecta el crecimiento económico, una mayor igualdad social y un entorno propicio para la prosperidad mundial. El desarrollo no es posible sin energía y el desarrollo sostenible no es posible sin energía sostenible”.
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