WASHINGTON.- Opositores venezolanos se reunieron con funcionarios del gobierno del presidente Donald Trump la semana pasada para exhortar a la Casa Blanca a sancionar a Nicaragua y a una empresa conjunta, que alegan ayuda al gobierno de Caracas, según varias fuentes familiarizadas con las conversaciones.
Cinco miembros de la oposición venezolana se reunieron el jueves en el Capitolio con funcionarios del Departamento de Estado y personal de las comisiones de Relaciones Exteriores de la Cámara y el Senado. Los opositores exhortaron a Washington a investigar los lazos del presidente venezolano Nicolás Maduro con Nicaragua, y específicamente la compañía privada Albanisa, una empresa conjunta entre PDVESA, el monopolio estatal petrolero venezolano, y su contraparte nicaragüense.
“PDVSA tiene operaciones con otros países que deben investigarse y deben incluirse en las sanciones, como la empresa que PDVSA estableció con Nicaragua, Albanisa”, dijo a McClatchy Carlos Vecchio, coordinador nacional del partido opositor venezolano Voluntad Popular.
En reuniones con el Departamento de Estado y legisladores, Vecchio dijo que Albanisa participa en actividades de corrupción, lavado de dinero y financiación del régimen de Maduro. No fue posible contactar de inmediato a ejecutivos de Albanisa para que comentaran al respecto.
Trump lanzó una serie de sanciones financieras para castigar a Venezuela y varios de sus líderes después que Maduro realizó una votación, ampliamente considerada un fraude, que inició el proceso de desbaratar instituciones democráticas. El ministro económico de la embajada de Estados Unidos en Managua entonces advirtió a los ciudadanos y empresas estadounidenses que revisaran sus transacciones de negocios con compañías afiliadas con Venezuela, como Albanisa, para asegurar el cumplimiento de las sanciones de Washington.
El gobierno de Trump ha prometido continuar aumentando la presión sobre el gobierno de Caracas hasta que restaure algunas instituciones democráticas.
Para Nicaragua Trump solo ha decidido suspender el TPS, que permitía a mas de 5 mil nicaragüenses permanecer en Estados Unidos, sin preocuparse por su documentación, pero dicho permiso expira en el mes de enero del año 2019, que de no realizar alguna gestión de legalización, o se regresan al país de origen o se mantienen ilegalmente.
El Congreso de Estados Unidos tiene pendiente ratificar la Ley Nica Act, que suspendería préstamos de organismos financieros internacionales, como el BID, el Banco Mundial entre otros, donde tenga incidencia el gobierno estadounidense, entre otras cosas.
FUENTE: El Nuevo Herald.
Defender los recursos de petroleo y minerales ha sifo el pecado de Venezuela…eso es imperdonabley el imperio no se cansa de aplicar saniones