Álvaro José Talavera Blandón, de 28 años de edad, un migrante nicaragüense que llegó en enero de este año a Estados Unidos, falleció a causa de una fuerte depresión al verse angustiado por no conseguir un trabajo que pudiera suplir las necesidades económicas.
Su madre Narcisa Chavarría Palacios, dijo a un medio nacional que su hijo no había encontrado un trabajo desde su llegada en enero a la nación norteamericana.
Talavera se alojaba en la casa de su primo Otoniel Talavera, en EE.UU. y desde su llegada comenzó a buscar trabajo, para obtener ingresos con el que buscaba pagar un dinero que prestó para poder realizar el viaje hasta ese país y poder ayudar económicamente a sus hijos.
El pinolero no concretó conseguir el trabajo y esto lo llevó a desesperarse y posteriormente caer en la depresión.
Chavarría confesó que debido a la condición de su hijo tuvo que ser ingresado a un hospital, pero un tiempo después regresó a la casa de su primó quien lo encontró muerto en su domicilio.
“Él quería un trabajo digno para ayudar a su familia, pero algunos días hallaba trabajo y otros días nada, él aguantó mucha hambre y entonces se enfermó, lo tuvieron en el hospital, después regresó a la casa de su primo, quien salió a trabajar y cuando volvió ya lo encontró muerto», explicó su madre.
Deje su comentario