“La dictadura de Cuba es la más antigua de la región y tiene su fuerte influencia en Venezuela, Nicaragua y Bolivia”, expresó este martes el politólogo Carlos Sánchez Berzaín en el foro “Derecha e Izquierda en el Siglo XXI” que se realizó en la Universidad Internacional de Florida (FIU).
El foro fue organizado por Interamerican Institute for Democracy (IID) y el Adam Smith Center for Economic Freedom. El objetivo era discutir y recoger propuestas sobre la naturaleza actual de los conceptos de “izquierda y derecha”, que merecen varias y diferentes acepciones en la sociedad, la política, y la opinión pública y de prensa en diferentes latitudes como Europa, Estados Unidos y América Latina.
Sánchez Berzaín, agregó que “las derechas y las izquierdas dependen del tiempo y del espacio. Hay que preguntar derecha e izquierda cuándo y hay que preguntar derecha e izquierda dónde”, indicó.
Carlos Sánchez Bersaín.
Mientras, Maria Werlau, fundadora y directora ejecutiva del bloque centrochavista Archivo Cuba, se refirió a la izquierda latinoamericana tras el derrumbe soviético y señaló el crecimiento de la corrupción.
“El objetivo es imponer pobreza con dependencia del estado. Como el modelo populista se autodestruye económicamente, las élites dependen de actividades ilegales”, expresó la opositora cubana, acusando de esas practicas a “Venezuela, Nicaragua, Bolivia y varias islas del Caribe”.
En el foro además se abordó la libertad de expresión en dichos países “con regímenes”. Iliana Lavastida, directora de Diario Las Américas, señaló que “en Cuba, Venezuela y Nicaragua la situación es compleja para ejercer el periodismo“.
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“No debemos temer denunciar por ejemplo en Nicaragua las franjas de tierra que Ortega cedió a China”, subrayó la comunicadora, indicando que “el compromiso con la verdad es una de las cosas más importantes”.
Por su parte, Tim Padgett, editor de National Public Radio, el servicio de radiodifusión pública de Estados Unidos, subrayó que “es importante para los periodistas discernir si un gobierno o un movimiento político es democrático o autoritario”, pero no le convence la idea de “descartar la derecha y la izquierda como identificadores por dos razones”.
“Sigo pensando que son importantes para describir cómo gobiernan los países que cubrimos. También son importantes para que el periodismo explique los poderes”, detalló.
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