El Ministerio de Asuntos Exteriores de Francia anunció este lunes la expulsión de varios diplomáticos rusos al considerar que su estancia en el país es contraria a los intereses de seguridad nacional.
“Francia ha decidido expulsar a numerosos trabajadores rusos con estatuto diplomático destinados en Francia y cuyas actividades son contrarias a nuestros intereses de seguridad”, apunta una nota del Ministerio de Exteriores.
La medida del gobierno francés se da a tan solo unos días que Ucrania denunciara a Rusia por crímenes de guerra cometidos en la región ucraniana de Boutcha, donde yacen varios cuerpos de civiles.
“Las imágenes que nos llegan desde Boutcha, un pueblo liberado cerca de Kiev, son insoportables. En las calles, cientos de civiles asesinados cobardemente. Mi compasión por las víctimas, mi solidaridad con los ucranianos. Las autoridades rusas tendrán que responder por estos crímenes”, expresó en su red social el presidente de Francia, Emmanuel Macron.
Este mismo lunes 4 de abril el gobierno alemán se sumó a las mismas medidas y declaró “persona non grata” a 40 diplomáticos rusos de la embajada de Berlín.
“Se trata de personas que día a día trabajan contra nuestra libertad y contra nuestra cohesión social”, según el comunicado emitido por la cancillería alemana.
Países de Bélgica, Holanda e Irlanda, también han utilizado el mismo método de sanciones al gobierno ruso que desde finales de febrero de 2022 inició su invasión a territorio de Ucrania.
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