Álvaro Antonio Ruiz Dávila y su progenitora Eusebia Antonia Dávila Díaz, permanecen capturados por la policía, tras el asesinado de Salomón López Smith, de 50 años de edad el pasado 7 de marzo, en el municipio de Bonanza, Triángulo Minero, Caribe Norte.
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Investigaciones de agentes policiales constataron que los acusados incidieron en la muerte de López, después de recoger testimonios de personas, que apuntaban como responsables del crimen a madre e hijo.
Uno de los testigos comentó que Ruíz y Dávila mantenían una disputa por un terreno con el señor de cincuenta años. De acuerdo a las declaraciones de los testigos, ambos se presentaron armados a la casa de López, exigiéndole abandonar la propiedad.
Ante la negativa de López de abandonar el lugar, le ataron las manos con un mecate, trasladándolo a un potrero en horas de la noche, lugar donde se presume que recibió un impacto de bala a manos de Eusebia.
Desde ese día su cuerpo permanecía desaparecido hasta que el hijo del occiso, Salomón Dionisio López Dixon, de 28 años de edad, decidió interponer una denuncia el 9 de marzo. El domingo 13 de marzo agentes policiales con ayuda de la técnica canina encontraron sus restos en el potrero.
La policía pudo dar con el paradero del señor, gracias a los relatos de los testigos quienes comentaron que habían visto por última vez a López en ese potrero.
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Médicos forenses hicieron presencia el día del hallazgo, y determinaron que la muerte del señor estuvo relacionada a un ‘Shock hipovolémico’ producto del impacto de bala.
Durante el crimen también se vinculó a Alexander Ruiz Dávila, quien es familiar de los acusados y de momento se mantiene prófugo de la justicia. La policía reveló que las tierras por la cual mantenían la disputa, en realidad pertenecían a Salomón López Smith.
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