Un joven de tan solo 14 años de edad falleció en la madrugada del domingo 6 de febrero, después de haber jugado “Free Fire” en su casa de habitación. La víctima de iniciales C.M.G. habitaba en el Reparto Divino Niño, Chinandega.
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Su familia muy consternada por lo ocurrido relató que el menor se encontraba jugando el famoso videojuego, a eso de las 2:30 de la madrugada del domingo. Minutos después de haber terminado de jugar, de repente empezó a convulsionar y expulsar sangre, falleciendo al instante.
Ante los rumores de que el menor padecía de alguna enfermedad que le haya causado la muerte, sus padres desmintieron esa posibilidad. Al mismo tiempo se negaron que los médicos forenses indagarán las causas de su muerte, pues creen que su deceso surgió de manera natural.
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Personas cercanas al joven además de sus familiares, comentaron que el fallecido era muy apegado al juego. Se decía que pasaba unas 15 horas diarias disfrutando del videojuego. En ocasiones no conciliaba el sueño por estar jugando.
Sus restos fueron velados en la casa de su papá, en Reparto Dávila Bolaños.
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