El subsecretario de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado norteamericano, Brian Nichols, reaccionó a la reciente investidura del gobierno Ortega-Murillo, y a la polémica participación del terrorista iraní Mohsen Rezaí, a quien la Interpol busca capturar por su participación en el atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en 1994.
Nichols afirmó que los demás gobiernos del hemisferio no pueden ignorar lo que sucede en Nicaragua, donde “Ortega y Murillo socavan la democracia”.
“Las democracias en el hemisferio no pueden mirar a un lado mientras Ortega-Murillo socava la democracia y la seguridad regional”, expresó en Twitter.
El pasado 13 de enero Ortega tuvo otro encuentro con Rezaí, quien funge como vicepresidente de Asuntos Económicos de Irán. En la reunión se rindió homenaje al general Qasem Soleimani, jefe de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria de Irán, eliminado por EEUU. Según Washington tenía información que Soleimani, pretendía realizar atentados contra ciudadanos estadounidenses.
Por su parte Ortega, calificó de “héroe” al general. “Fue un mártir en la lucha por la paz asesinado por los imperialistas de la tierra”, comentó.
Durante la junta Rezaí, dejó claro su apoyo total por parte de Irán a Nicaragua, en un momento que las relaciones diplomáticas de la administración de Ortega y Estados Unidos, se mantienen tensas.
“Irán está con Nicaragua. Los buenos amigos tienen que acompañarse unos a otros en condiciones como esta”, dijo.
La Organización de Estados Americanos (OEA) y el gobierno de Argentina condenaron la presencia de Rezaí en Nicaragua, alegando que dicho acto representaba una seria amenaza para la paz y la seguridad del Hemisferio Occidental
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