La policía de Nicaragua informó que el pasado martes logró decomisar un cargamento de cocaína valorado en 2,2 millones de dólares en la frontera de Peñas Blancas, que conecta con Costa Rica.
La droga era transportada en un furgón conducido por un ciudadano guatemalteco identificado como Eswin Rolando Santos Cordero, de 36 años de edad, quien fue arrestado de inmediato. El cargamento también fue puesto a la orden de “las autoridades competente”.
El jefe de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ) de la policía, Victoriano Ruiz. detalló que la droga iba compactada en al menos 84 paquetes envueltos en cinta adhesiva, color café, con sustancias color blanco (cocaína), y pesaban aproximadamente 88 kilos con 298,2 gramos.
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La Policía señaló que la captura ocurrió en el marco del plan denominado “muro de contención”, una estrategia permanente que, según las autoridades, consiste en impedir “el ingreso y circulación de drogas, incautación de activos proveniente de actividades ilícitas, o el establecimiento de agrupaciones del crimen organizado”.
Por su posición geográfica, Nicaragua forma parte de un corredor de alto tráfico de drogas, que se producen en Suramérica, y que luego son trasladadas a Norteamérica, donde operan, principalmente, los carteles mexicanos y residen los mayores consumidores.
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