Siete nicaragüenses secuestrados por un cartel mexicano fueron liberados

Rostro de una de las jóvenes matagalpinas, que fue secuestrada.

Siete migrantes nicaragüenses que estaban secuestrados por un cartel mexicano hasta hace unos días, fueron liberados de manera afortunada. Entre los secuestrados estaban tres ciudadanos de Matagalpa y cuatro de Managua.

Sus familiares atravesaron momentos difíciles, después que los secuestradores solicitaron la cantidad de 10 mil dólares para dejarlos en libertad. De no cumplir con la entrega del dinero, ellos procederían a quitarles la vida.

De los sietes nicaragüenses raptados, estaba la joven matagalpina Gerlenis Jiménez junto a su hija, quienes decidieron emprender el viaje a Estados Unidos en busca de un mejor estilo de vida. María Teresa Delgadillo, también oriunda de Matagalpa, tomó la decisión de hacer el viaje en busca del sueño americano, y poder ayudar económicamente a su familia.

Ambas matagalpinas eran conscientes del riesgo a realizar el viaje, sin embargo, la situación económica que atraviesa Nicaragua, las instó a emigrar a otro país.

Vivienda de Clementina Delgadillo, madre de María Teresa.

Tras su liberación, Delgadillo se contactó de inmediato con su mamá Clementina del mismo apellido, para comunicarle la noticia de su liberación, según relató Nancy Ferrufino, allegada a la familia.

“Ya tuvimos la oportunidad de hablar con ella (Teresa Delgadillo) para saber que realmente está bien. Hemos llorado de alegría, de agradecimiento a Dios sobre todas las cosas. Todos están bien, la niña y los muchachos”, confesó Ferrufino.

Ante la noticia del secuestro de los nicaragüenses, familiares y amigos de Jiménez, se movilizaron a buscar ayuda económica, para poder depositar el dinero para su libertad, que los secuestradores exigían. Josseling Guevara amiga de la familia de Gerlenis Jiménez, colaboró con unas alcancías para tratar de recaudar la cantidad de dinero.

A pesar de los esfuerzos, se les comunicó que habían sido puestos en libertad. “Desde el primer día estuve cerca de la familia, preparamos todo para los tarros y aunque ellos siguen en México ya están en un mejor lugar”, dijo Guevara.

Ambas familias entregaron el dinero a los miembros del cartel mexicano, pero no era la cantidad suficiente que ellos pedían. Los parientes creen que solamente Dios hizo posible su liberación.

Sea el primero en comentar

Deje su comentario

Su correo no será publicado.


*