La afectación económica a causa de la pandemia se puede ver reflejada a nivel mundial con la denominada “crisis de los contenedores”. Debido a la escasés de los mismos para transportar mercancía de Asia a Occidente.
Para los expertos en economía esto se deriva en producto de que los costos que han incrementado más allá de lo que esperaba el mercado a nivel internacional.
Pero, ¿esta situación podría afectar a Nicaragua dentro de los últimos meses? El economista, Luis Núñez, considera que el golpe económico en el país debido a la afectación en el servicio marítimo podría ser menor.
“En el caso de Nicaragua, nuestro flujo es bastante limitado y el transporte de mercancía de Asia es bastante bajo. Es decir, nosotros nos movemos con las importaciones de América Latina hacia los diferentes países del continente”, explica el experto.
Voz del economista, Luis Núñez.
Los distintos productos preparados para finales de año podrían encontrarse ya en el país. Por la tanto, a pesar de que no podría verse afectado en primera línea tampoco se descarta que algunos productos o mercancía podrían aumentar sus costos para este y el año 2022, agrega Núñez.
“No descartamos que para el inicio del 2022 si haya productos como los escolares que puedan subir su precio, que si es más sensible para la economía nicaragüense. Sin embargo, la población se ajustará a mercancía menos costosa. Y con respecto a estos tres meses del 2021 la gente gastará en productos de primera necesidad y decidirá si adornará o no su casa con lo que es alusivo a las festividades navideñas. Aquí los afectados serán comerciantes porque no es producto de primera necesidad y tienen que acomodarse a esa situación y absorber el impacto de este tipo”, dijo Luis Núñez.
Empresas afectadas
Efectivamente “la crisis de contenedores” está afectando América Latina en cuanto al precio del servicio del transporte marítimo.
“Es importante destacar que no todo los productos son con destino para Nicaragua. Recordemos que nuestro mercado es pequeño nuestras importaciones pueden andar entre los 4 o 5 mil millones de dólares distribuidas en todo el año. Entonces no necesariamente tendrá un gran impacto. Incluso nuestras importaciones pueden venir de Panamá y no necesariamente de China o Asia”, manifiesta.
Puerto Corinto-Nicaragua.
Voz del economista, Luis Núñez.
Para el experto los consumidores no serán los principales afectados, sino, las grandes empresas, a las cuales les tocará el costo del transporte de productos.
“Estudios internacionales han revelado que los precios se han cuadruplicado, y el problema no será para el consumidor, sino, para las empresas importadoras quienes tienen que asumir en parte los estragos de esta crisis”, finaliza Núñez.
Consecuencias inevitables
Inicialmente, las duras restricciones en China y Europa paralizaron embarques desde el resto del mundo y unos 500.000 buques quedaron sin zarpar por varias semanas en puertos estadounidenses.
Los buques de China y otros países de Asia partieron y llegaron a Estados Unidos, pero no pudieron descargar por varios meses, tanto por las restricciones para bajar a tierra, como por las restricciones locales que redujeron al mínimo el personal para carga y descarga y también en las aduanas.
Los puertos se congestionaron de buques que no pudieron descargar rápidamente sus contenedores ni cargar otros para transportar a sus puertos de origen y otros. Como consecuencias inevitables surgieron la caída de la cantidad de buques disponibles y de contenedores vacíos para cargar bienes a ser remitidos a otros países.
En los puertos de América del Norte, aproximadamente 4 de cada 10 contenedores fueron devueltos a China. El resto siguió en los puertos de llegada.
El volumen de las transacciones ha rebasado la capacidad de carga de las navieras: las cotizaciones para trasladar un contenedor han incrementado un 500%, pasando de promedios de 4 mil dólares a 20 mil dólares.
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