En Reino Unido la policía inglesa arrestó al ciudadano identificado como Jordan Lee de 29 años por haber asesinado a su pequeña hija de 4 meses en su propio domicilio.
Los ciudadanos de ese país se mantienen sorprendidos ante el lamentable hecho, ya que Lee golpeó brutalmente a la menor tras gritarle que se callará.
La pequeña identificada como, Willow falleció tras ser llevada al hospital Blackpool Victoria; y posteriormente trasladada al Hospital Infantil Alder Hey.
Los médicos forenses determinaron que las heridas que mostraba la niña de 4 meses eran consistentes y atribuibles a un trauma severo de una lesión traumática en la cabeza, consistente con temblores fuertes
La niña también sufrió hematomas extensos en la oreja, la cara y el brazo. El patólogo dijo que ese era el resultado probable de agarrar, pellizcar o apretar, golpear o abofetear, lesiones que habrían causado “un inmenso dolor y sufrimiento”.
Jordan Lee de 29 años fue condenado a 16 años de cárcel por haber asesinado a su pequeña hija de 4 meses en su propio domicilio.
Sin embargo, el padre al ser detenido confesó que las heridas era producto de un accidente infantil.
Un portavoz de la Fiscalía sostuvo que “los vecinos escucharon el llanto del bebé y a un hombre que le gritaba que se callara, junto a una serie de golpes antes de que la casa se quedará en silencio”.
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A pesar de eso, en el propio juicio el padre de la bebé mantuvo su postura e indicó que repentinamente Willow “se cayó del sofá”.
Tras largo proceso judicial; el hombre fue declarado culpable del asesinato de la lactante y condenado a 16 años de cárcel, luego de constatarse incoherencias en sus declaraciones.
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