Los nicaragüenses están lejos de presenciar un “paro vehicular” en símbolo de protesta por las constantes alzas en los precios de los combustibles, debido a la represión que ejerce el régimen de Daniel Ortega contra quienes alcen su voz, según el dirigente del Transporte Urbano Selectivo, Emilio Jarquín. Los taxistas están agobiados, pero temen a ser atacados si se manifiestan.
¿Qué pasaría si el gobierno no reprimiera? se le consultó a Emilio. “Esto ya estuviera incendiado por que aquí se está tocando el estomago de la gente más humilde”, fue su respuesta. Asegura que con el incremento en los precios de los hidrocarburos, los más afectados son los cadetes, que a diario deben recoger 300 córdobas o más para pagar el turno correspondiente del taxi utilizado.
“A veces solo se ganan 50 córdobas y algunos tienen hijos y otras obligaciones como pagar los recursos básicos, agua, luz y otras cosas”, expresó Jarquín.
Voz de Emilio Jarquín.
La última vez que los taxistas manifestaron fue en mayo 2018, en el contexto de las protestas antigubernamentales y la rebelión cívica. En ese entonces la concentración fue porque los precios de los combustibles aumentaron cuatro semanas consecutivas (1 mes).
Concentración de taxistas en la rotonda de Metrocentro o Rubén Darío. Managua / Nicaragua. Mayo 2018.
FOTO: El Nuevo Diario.
Actualmente, los carburantes han aumentado su precio por 19 semanas consecutivas, es decir casi cuatro meses.
“Ellos si se manifestaban”
Durante el período de los expresidentes de Nicaragua, Arnoldo Alemán y Enrique Bolaños, las manifestaciones por las alzas en los precios de los combustibles eran infaltables, asevera el dirigente transportista, agregando que en su mayoría eran promovidas por el Frente Sandinista de Liberación Nacional, quienes perdieron el poder en 1990, pero su modo operandi era “mandar desde abajo”, y posterior recuperaron la cima en 2007.
Año 2003. Taxistas realizan paro vehicular en las cercanías de la Asamblea Nacional en Managua.
FOTO: Cortesía.
En los años de Alemán y Bolaños el incremento en el precio de los carburantes eran de 25 centavos, y por eso hasta quemaron buses e hicieron “chanchadales” en este país, asegura la fuente. Aduce que la protesta es una acción cívica, pero el gremio no se atreve a levantar su voz en las vías publicas por la militarización (policías en las avenidas).
Voz de Emilio Jarquín.
Un ciclista, cruza la muralla de humo, producida por las llantas que encendieron frente a la cooperativa de buses Parrales Vallejos, los trabajadores de esa empresa, durante el primer día de protesta que lleva a cabo el sector transporte por el alza del combustible cuando Ortega mandaba “desde abajo”.
FOTO: La Prensa.
Rumor del pitazo
En redes sociales se rumora que el sector taxi, y muchos conductores particulares pretenden realizar un pitazo por las principales avenidas de Managua el próximo miércoles. A nivel de cooperativa se rumora lo mismo, dice Jarquín, pero indica que no es nada confirmado.
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