Al rededor de una 80 familias de comunidades pobres del municipio de Murra, están a la espera de recibir asistencia humanitaria por parte del gobierno central, después que resultaran afectadas por el paso de los huracanes Eta y Iota dejando sin viviendas a estas personas.
El paso del huracán Eta y Iota destruyó sus cultivos de maíz y frijol y sus viviendas, por lo que la mayoría de las 80 familias damnificadas permanecen aún en refugios provisionales montados por las autoridades de la alcaldía del municipio de Murra, en Nueva Segovia, quienes han logrado atender a los afectados con recursos propios de esa municipalidad y el apoyo de la Iglesia Católica.
Los pobladores de esta zona aseguran que el gobierno en turno, se a encargado de priorizar únicamente a la gente que pertenecen al Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) con láminas de zinc, mientas que a las demás familia no se les entrega nada.
“El problema aquí es que el gobierno prioriza a la gente que es de su partido y a los que no pertenecemos lo más seguro es que nos dejen por fuera en la repartición de láminas de zinc y alimentos”, manifestó Héctor Machado Martínez, de 63 años, habitante de un barrio del poblado del municipio de Murra, quien junto a su esposa y tres hijos salieron de su vivienda que resultó parcialmente afectada y sus enceres se perdieron por las correntadas de agua que se les llevó todo.
Martínez permanece en un refugio que lograron organizar las autoridades de la alcaldía de esta localidad, y la ayuda que ha estado llegando a ese lugar ha sido víveres y ropa brindada por la municipalidad, organizaciones no gubernamentales y líderes de la iglesia católica de Murra.
“Llevamos varias semanas en albergues de la Alcaldía. En el caso de mi familia perdimos la casa, las cosas (ropa, trastos y camas y los animales vacas, gallinas y cerdos), además de la siembra de maíz y frijoles por las inundaciones en los potreros por el desborde del río y aquí estamos sin recibir ayuda del gobierno”, expuso don Emilio Ponce Tercero, quien, junto a su esposa Maritza Chavarría Rocha y sus dos hijos, abandonó su hogar en la comunidad Los Arenales número 2 del municipio de Murra, en Nueva Segovia.
Después del paso de Eta y Iota, decenas de familias de varias comunidades de ese municipio aún permanecen incomunicadas por el mal estado de los caminos de penetración.
“Todavía hay caminos a comunidades que están intransitables, eso es horrible, eso es un riesgo para las personas que viajan. Nos preocupa la perdida de las cosechas que incluye el café, porque las lluvias han continuado. Son 63 comunidades que están incomunicadas como Victoria, Quebrada Negra, Rosario, Santo Domingo, Los Arenales, Los Cedrales, Chachagua y Los Tréboles”, dijo la vicealcaldesa Ninoska Godoy Cruz.
Ninoska Godoy Cruz añadió que los miembros del Concejo Municipal de la Alcaldía de Murra acordó dar prioridad a la reparación de los caminos y carreteras que quedaron destruidas por los dos huracanes, “en la sesión anterior se había aprobado invertir más de 250 mil córdobas, del cual ya está el desembolso para comenzar a trabajar, pero como no ha parado de llover no hemos empezado las obras”, finalizó diciendo.
Información del corresponsal de Radio Corporación, Denis García.
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