Una vez más es negligente el Sistema Penitenciario Nacional con los privados de libertad, especialmente los encarcelados por motivos políticos. El reo de la Isla de Ometepe, Justo Rodríguez, se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos de un centro hospitalario producto de un derrame cerebral sufrido en el interior del Sistema Penitenciario Nacional, denunció la abogada Yonarqui Martínez.
Extraoficialmente familiares de Rodríguez y cuerpo de abogados se enteraron de su delicado estado de salud desde el pasado jueves. Se dirigieron de inmediato a la modelo en Tipitapa, pero no recibieron información sobre el detenido.
“Al día siguiente – viernes – tampoco se les permitió a los familiares ingresar al penal, le dijeron que efectivamente estaba enfermo pero que no le podían decir lo que evidentemente tenía”, manifestó Martínez. 
Fue hasta ayer – domingo – que funcionarios del Sistema Penitenciario Nacional se comunicaron con familiares de Rodríguez y posterior los citaron para informales de la situación.
La defensora de derechos humanos, dice que el preso político “Esta bajo un respiradero artificial”. Considera que el traslado tardío a un hospital pudo haber influido mucho en su estado de salud.
La hermana del reo, Emérita Rodríguez, ahora se encuentra en el hospital Lenin Fonseca en Managua, a la espera de noticias de su pariente, custodiada por una batería policial. “Como si tal fuese una presa política”, expresó Martínez. 
Justo Rodríguez, que roza los 70 años de edad, fue detenido el pasado mes de abril en la Isla de Ometepe, cuando se conmemoraba el segundo año de la insurrección cívica en contra del gobierno de Daniel Ortega.
Fue salvajemente golpeado al momento de su captura. El pasado 21 de julio el sistema judicial lo declaró culpable por el delito de obstrucción de funciones policiales.
Existe clara negligencia de las autoridades del Sistema Penitenciario Nacional, asevera la abogada Martínez.
Señala que, “La vida de Justo pesará sobre aquellos funcionarios que hicieron omisión de auxilio. Es un delito no dar auxilio a un privado de libertad”.
Son muchos los antecedentes en torno a negligencia de funcionarios del sistema penal de Nicaragua.
En el mes de mayo el preso político Uriel Pérez estuvo entre la vida y la muerte al presentar problemas respiratorios asociados al Covid-19. En todo momento autoridades del penal negaron información.
El 16 de mayo del 2019, en el interior de la Modelo el preso político Eddy Montes fue herido de bala por un custodio. Montes murió cuando era trasladado a un centro asistencial.
A la fecha se desconoce el nombre del funcionario que disparó a la humanidad del reo, el crimen quedo en la impunidad.
“La verdad no esperamos que haya otro Eddy Montes”, son palabras de la abogada Yonarqui Martínez.
“Los defensores estamos cansados de denunciar lo que hacen los funcionarios de los penales con nuestros presos políticos”, concluyó.
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