Corea del Sur: “Donald Trump debería recibir el Premio Nobel de la Paz”

El presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, dijo este lunes que su par estadounidense, Donald Trump, debería ganar el Premio Nobel de la Paz por sus esfuerzos para frenar el programa de armas nucleares de Corea del Norte, de acuerdo a un funcionario del gobierno en Seúl, luego de que fuera sugerido que el surcoreano debía hacerse con el galardón.

“El presidente Trump debería ganar el Premio Nobel de la Paz. Lo que necesitamos es sólo paz”, declaró Moon en una reunión de gabinete, según un funcionario de la Casa Azul presidencial que informó a los medios.

Los comentarios de Moon fueron una respuesta a los elogios de Lee Hee-ho, viuda del fallecido presidente surcoreano y Nobel de la Paz Kim Dae-jung, quien afirmó que el actual mandatario merecía ese premio en reconocimiento por sus esfuerzos diplomáticos.

Kim Dae-jung mantuvo una política de acercamiento con el norte, similar a la de Moon Jae-in, durante su presidencia entre 1998 y 2003.

A raíz de esto logró realizar la primer cumbre entre líderes de las dos Coreas de la historia, cuando se reunió en 2000 con Kim Jong-il, padre del actual dictador norcoreano. Ese mismo año recibió el Nobel de la Paz.

El viernes, Moon y el líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, prometieron poner fin a las hostilidades entre ambos países y trabajar para la “completa desnuclearización” de la Península Coreana, en la tercera cumbre intercoreana y la primera en más de una década.

Trump, en tanto, se está preparando para celebrar su propia cumbre con Kim a fines de mayo o principios de junio.

Esa reunión fue el tema principal de una caminata privada y conversación entre Kim y Moon durante su encuentro en la frontera ante ambos países, dijo el funcionario.

En enero, Moon dijo que Trump “merece un gran crédito por generar las conversaciones intercoreanas. Podría ser un trabajo resultante de las sanciones y presión liderados por Estados Unidos”, afirmó.

El acercamiento entre Corea del Norte y Corea del Sur, con los auspicios de Estados Unidos y China, contrasta con la escalada de tensiones vividas el año pasado, cuando Trump y Kim intercambiaron insultos e hicieron demostraciones de fuerzas que parecían marcar el camino a una guerra.

Fuente: Reuters