El actor y director Ben Affleck estuvo en septiembre pasado en un centro de desintoxicación tras sufrir una recaída en su adicción al alcohol, informó la revista People.
El último Batman de la pantalla grande confesó en marzo que había terminado un tratamiento por su alcoholismo tras varios años de lidiar con sus problemas con la bebida.
“Pidió ayuda. Quiere estar sobrio”, aseguró una fuente a la revista estadounidense. Estuvo acompañado en todo momento por su ex, Jennifer Garner, y por su hermano, Casey.
Tras la internación, el actor cumplió sus compromisos laborales y continuó con sus viajes de promoción del filme La Liga de la Justicia, junto con un acompañante terapéutico.
“Esta es una batalla de por vida. Él no se lo toma a la ligera. Se concentra en su familia y mejora para poder continuar con aquello que ama”, agregó la fuente a People.
La recaída del actor coincide con las revelaciones que lo involucran con el caso del productor en decadencia Harvey Weinstein, de quién Affleck era amigo desde sus inicios.
“Quiero continuar mi proceso de mejora, evaluar mi comportamiento, reconocer cuándo lo haces mal y ser lo mejor para mi familia, mis hijos, mis compañeros de trabajo y aquellos con quienes estoy día a día”, aseguró el intérprete en una reciente entrevista a El País.
Fuente: Infobae
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