Un ranchero de Arizona ha sido acusado de asesinato en primer grado y se le fijó una fianza de un millón de dólares por disparar fatalmente a un migrante que pasaba por su propiedad, cerca de la frontera de EE.UU.-México.
El Departamento de Policía del Condado de Santa Cruz en Nogales, Arizona, confirmó que el hombre identificado por George Alan Kelly, de 73 años, fue detenido tras el homicidio.
Distintos medios estadounidenses reportaron que el acusado ha tenido problemas con personas en su propiedad en el pasado, teniendo en cuenta que muchos migrantes suelen pasar cerca de su propiedad ya que está muy cerca de la frontera.
La víctima corresponde al nombre de Gabriel Cuen Butimea, de 48 años, que vivía al otro lado de la frontera, en Nogales (México). Las autoridades señalaron que Gabriel había cruzado previamente la frontera de forma ilegal y había sido deportado en múltiples ocasiones, la última en 2016.
La policía no ha facilitado detalles sobre el caso y se desconoce si los dos hombres se conocían. Tampoco se han facilitado los motivos que originaron el crimen.
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