El gobierno de Perú le prohibió la entrada al país al expresidente de Bolivia, Evo Morales, considerando que su presencia afecta la seguridad interna del país.
“El Perú es un país soberano y democratico, cuyo ordenamiento migratorio establece que el ciudadano extranjero en el territorio nacional tiene el deber de conducirse con respeto al ordenamiento jurídico, en especial en lo referido a la seguridad nacional y al orden señaló el comunicado del Ministerio del Interior.
El rechazo a Morales, se debe a que la presidenta Dina Boluarte lo acusa de incentivar a las protestas, que han sido permanentes desde que ella asumió, a principios de diciembre pasado, en lugar de Pedro Castillo.
Boluarte anunció que la situación de Morales estaba siendo analizada porque no debe “intervenir en temas internos”. “En Perú tenemos el derecho de tejer nuestra propia historia y que nadie, personas ajenas al territorio nacional, tengan que venir y querer intervenir en tejer nuestra historia”, subrayó.
En noviembre de 2021, la comisión de Relaciones Exteriores del Congreso declaró persona non grata a Morales “por su negativo activismo político en Perú y su evidente injerencia e intromisión en la agenda del Gobierno” del entonces presidente Pedro Castillo (2021-2022).
Desde las manifestaciones desatadas en Perú el ex mandatario de Bolivia ha estado muy activo en las redes sociales con opiniones sobre la crisis en Perú y mensajes para defender a Castillo desde su destitución el 7 de diciembre pasado. Este comportamiento no ha gustado al gobierno de Perú por lo que ha negado su ingreso al país sudamerciano.
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