Estados Unidos anunció el cierre de la frontera sur para los migrantes irregulares de Nicaragua, Cuba y Haití.
Las autoridades señalaron que el país permitirá la entrada cada mes de hasta 30,000 migrantes de dichos países. Además que las restricciones se endurecerán con todo aquel que intente cruzar la frontera con México sin la documentación necesaria.
“Hemos decidido expandir el programa de parole, ahora no solo para Venezuela, sino para nacionales de Cuba, Haití, Nicaragua, que juntos (estos cuatro países) contabilizan la mayoría de personas que tratan de cruzar la frontera” manifestó el mandatario estadounidense.
La cuota de migrantes se limitará a quienes tengan a un patrocinador estadounidense, y aquellos que intenten entrar de forma ilegal serán expulsados bajo la norma sanitaria conocida como Título 42 y con la intervención de la policía, en coordinación con México.
Los beneficiados con esta medida propuesta por el mandatario americano establece que los migrantes aceptados podrán permanecer legalmente en en el país por un período de dos años y serán elegibles para solicitar una autorización de empleo temporal válido por el tiempo de permanencia autorizado.
“Si trata de salir de su país para llegar a EEUU, no llegue hasta la frontera, quédese donde esté y aplique al programa, si trata de entrar ilegalmente no será elegible” dijo Joe Biden.
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El presidente demócrata aprovechó su mensaje de cara a su visita a México para anunciar que se dará cita a El Paso, en Texas, el domingo, su primer viaje a la frontera suroeste desde que asumió el cargo y que se produce mientras los republicanos siguen criticando su enfoque de la seguridad fronteriza.
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