En los últimos días parece haber intensificado la migración nicaragüense a EE.UU., algunas de estas personas que deciden migrar terminan ingresando a tierras estadounidenses, mientras que otros no terminan con la misma suerte y fallecen en el intento, tal es el caso de la señora Felícita Lucrecia Soza, de 49 años de edad, quien falleció ahogada en el Río Bravo.
Soza era originaria de Chinandega y decidió emprender este largo viaje en compañía de su hija de 26 años, su sobrina de 22 años y una amiga. Lamentablemente en su travesía por llegar a Estado Unidos, termino perdiendo la vida.
La ciudadana chinandegana cruzó el río atada a un mecate en sus caderas para evitar ser arrastrada por las fuertes corrientes, sin embargo, no fue suficiente y el arroyo que estaba en su máxima capacidad le paso factura.
Las personas que viajaban con la fallecida relataron que mucho antes de cruzar el río, tenían alrededor de 14 horas sin ingerir alimentos y agua.
Durante ese tiempo sin consumir ningún tipo de alimentos, habían permanecido detenidas por el cartel Los Zetas. Soza había salido de Nicaragua desde el 4 de Febrero hacía Estados Unidos, y habían pagado 4 mil dólares a un coyote por cada una.
Felícita estuvo alrededor de 22 años viviendo en Estados Unidos, pero nunca logró mantener su documentación en regla en ese país, situación que la llevó a regresar a Nicaragua y posteriormente decidió emigrar nuevamente a la nación norteamericana sin imaginar que se encontraría con la muerte.
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