El Parlamento Europeo aprobó este jueves 16 de diciembre una resolución contra Nicaragua en la cual proponen que el alto representante para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, utilice todos los medios a su alcance para “incrementar sanciones individuales, y denunciar la cláusula democrática del Acuerdo de Asociación entre Centroamérica y la Unión Europea AdA”.
La resolución fue aprobada con 619 votos a favor. En ella desconocen las elecciones presidenciales del siete de noviembre en Nicaragua, destacando que se “orquestó una farsa para dar la apariencia de un proceso electoral, que no fue ni libre ni justo, totalmente antidemocrático e ilegítimo”.
El proyecto pide a la UE y sus Estados miembros “vigilar que los fondos europeos asignados, incluso a través de instituciones multilaterales y financieras, no contribuyan a reforzar la corrupción en Nicaragua”, exigiendo, debido a la situación de derechos humanos en el país, se active la cláusula democrática del Acuerdo de Asociación”.
Murillo y Ortega el día de las votaciones en Nicaragua.
En ese sentido Josep Borrell dijo que activar la cláusula democrática del AdA supondría suspender preferencias comerciales para Nicaragua, lo que afectaría a muchos ciudadanos que trabajan en los sectores de exportación hacia Europa.
Además, reiteran que “los presos políticos deben ser liberados” de manera “inmediata e incondicional”. La resolución condena los continuos abusos psicológicos y físicos a los que se enfrentan a manos de la policía y las autoridades penitenciarias, de los que las mujeres son un objetivo particular, y la situación de incomunicación de algunos de ellos sin acceso a sus abogados, familias o atención médica.
Los resultados de la votación se conocieron al finalizar la sesión que se desarrolló en Estrasburgo, Francia.
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