La Familia de la exguerrillera Mónica Baltodano, tomó la decisión de exiliarse para resguarda sus vidas y “vivir prácticamente en la clandestinidad”. La noticia la dieron a conocer en redes sociales.
“Ante la brutal oleada represiva que vive el país, hace pocos días decidimos salir temporalmente de Nicaragua, recorriendo una ruta por punto ciego para exiliarnos”, escribió Baltodano en su red social.
A Mónica y su familia les fueron otorgadas medidas cautelares en septiembre del 2018 por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Sin embargo, no fueron adoptadas por el gobierno de Daniel Ortega.
“Si bien desde septiembre de 2018 nos fueron concedidas medidas cautelares de protección por parte de la CIDH, las incesantes acciones de espionaje, presencia cotidiana de la inteligencia policial, hostigamiento y persecución política de la dictadura Ortega-Murillo, apuntaban a convertir a toda nuestra familia en prisioneros políticos”, agrega.
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Mónica Baltodano, su esposo Julio López Campos, y su hija Mónica Augusta López Baltodano, se despiden en el escrito: “La historia de lucha de Nicaragua demuestra que a todo régimen autoritario le llega su 19 de julio o su 19 de abril. Seguiremos luchando y apoyando los esfuerzos de los azul y blanco, con la confianza de que sólo el pueblo salva al pueblo”, citan.
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