Se esperaba que el gobierno de Daniel Ortega en Nicaragua se pronunciara sobre la sanción a Roberto Rivas Reyes, presidente del Poder Electoral pero no pronunció ninguna palabra.
En su alocución diaria a medios oficialistas la vocera, primera dama y vice presidenta del gobierno orteguista, Rosario Murillo hablo de accidentes de tránsito, de producción, homenajes pero calló sobre la sanción estadounidense para su funcionario público de confianza.
Verborrea oficial
La co gobernante del régimen se dedicó a utilizar su acostumbrada verborrea de “amor, solidaridad y cristiandad”
“Queremos vivir en paz. Queremos trabajo y paz. Queremos reconciliación y unidad. Queremos vivir como gran Familia, en esta Nicaragua de fe, familia y comunidad. Queremos todos los días sentirnos prosperando, todos los días sentirnos bendecidos, todos los días avanzar, en victorias”, dijo Murillo.
La sanción
Estados Unidos sancionó a Roberto Rivas congelando sus activos por “acumular una riqueza personal considerable, que incluye propiedades múltiples, aviones privados, vehículos de lujo y un yate”.
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